Los avances en materia digital no se detienen, muestra de esto es Blockchain, una tecnología que ha revolucionado el mundo y promete cambiar la forma en la que se ejecutan transacciones u otras actividades entre personas, pero ¿qué es?.
Desde hace un tiempo, el término Blockchain se ha convertido en uno de los más importantes con relación al futuro, sin embargo, muchas personas desconocen de qué se trata.
Esta tecnología, también llamada cadena de bloques, nació como parte de diversas tesis investigativas entre los años 1982 y 1992.
En estas se plantea un sistema que permite la realización de transacciones, principalmente monetarias, sin la necesidad de intermediarios.
Lo anterior a través de una red que une dos o más conjuntos de datos, denominados ‘bloques’.
Así pues, estos ‘bloques’ se enlazan unos con otros en forma de cadena, de tal forma que se ejecuta un envío de información, datos o dinero de persona a persona -P2P-.
En otras palabras, el planteamiento de Blockchain permitía prescindir de terceros, descentralizar las operaciones de dinero y crear un registro de las mismas.
Entretanto, lo que parecía un sistema utópico en aquella época de los 80’s y 90’s se hizo realidad por un hombre o grupo, aún desconocido, autoproclamado Satoshi Nakamoto.
En 2008, Nakamoto trajo al mundo un sistema revolucionario, 100% digital, con el que se pueden realizar transacciones comerciales inmediatas con una divisa digital llamada Bitcoin (BTC).
Entendido qué es Blockchain, ¿cómo se usa?
La primera Blockchain existente fue Bitcoin, la cual se implementó como un sistema de pago que hace los movimientos financieros más sencillos e independientes.
Esta cadena de bloques, conocida como el bloque génesis, conecta una Persona A con una Persona B, de modo que A hace un envío a B y se forma un bloque con los datos, en este caso dinero.
Partiendo de este principio, el dinero se transforma en un código único y se convierte en información -bloque-.
Posteriormente, el bloque se une con unos nodos, operados por usuarios anónimos conocidos como ‘mineros’, los cuales validan la transacción entre A y B, recibiendo ingresos porcentuales por comisión.
De tal forma, B recibe la transmisión del dinero por parte de A en cuestión de minutos, dejando un registro inalterable de la transacción, como si fuese una hoja de excel, por lo que además de ser descentralizada, es transparente.
Cabe resaltar que el dinero se transmite en código criptográfico, es decir, criptomonedas, las cuales se convierten de divisas como dólares a BTC, la cual se puede comprar en exchanges como Binance.
En resumen, la Blockchain es una red que registra información descentralizada y conecta a personas sin usar bancos o intermediarios, respetando el anonimato; y generando una base de datos inalterable.
Usos en la actualidad
Si bien este sistema se creó principalmente para acercar y facilitar las transacciones de dinero entre individuos, actualmente tiene diversos usos.
Entre estos se encuentra la creación de direcciones únicas de piezas llamadas Non Fungible Tokens o NFT.
Al mismo tiempo, se utiliza para el desarrollo de aplicaciones, al igual que plataformas tecnológicas descentralizadas en las que no puedan intervenir instituciones estatales, bancos u otras entidades.
A su vez, es empleada como una base de datos de información gubernamental, creación de registros e incluso para contratos públicos.
Por último, la creación de la cadena de bloques de Bitcoin le abrió la puerta al mundo de las criptomonedas, el comercio con estos tokens y proyectos digitales que trabajan con dinero virtual.
Además, sentó las bases para nuevas Blockchains, entre las que se destacan la Binance Smart Chain, Ethereum, que integró los contratos inteligentes; Cardano, Solana, entre otras.
Sin duda una tecnología que ha ampliado los horizontes de internet, al punto de ser una base para realidades virtuales, tales como el metaverso, y que ha generado libertad financiera para muchos.